La tecnología audiovisual progresa exponencialmente y casi cada año aparecen en el mercado nuevas máquinas profesionales (y domésticas) dispuestas a revolucionar el sector del vídeo.
Nada o poco tienen que ver las cámaras que se usaban en los inicios del cine, respecto a las modernas cámaras de la actualidad.
El gran salto se realizó recién inaugurado el tercer milenio, cuando la grabación de cine analógico se convirtió en cine digital. A partir de entonces, la calidad, resolución y sensibilidad de las cámaras digitales a llegado a unos niveles inimaginables en el siglo XX.
En la actualidad todo el proceso audiovisual es completamente digital. Tanto la grabación, como el editaje, así como la proyección (en salas de cine) se realiza en digital.
En el mundo videoclip las posibilidades y necesidades, en lo que se refiere a cámaras, son basicamente las mismas que en el cine u en otros formatos, pero si existen algunas particularidades.
A continuación, las 5 mejores cámaras para la grabación de videoclips musicales:
1º CINE BLACKMAGIC
Después de amasar una amplia experiencia en la creación de software de post-producción de cine, BlackMagic se lanzó a la piscina y creó la impresionante, extraña, revolucionaria, delicada y eficaz Cine BlackMagic.
Temida por muchos por su dificil manejo, Cine Black Magic destaca por su buenísimo sensor (de 16mm) y su rango dinámico de 13 stops. Algunos las consideran un magnífico sensor metido en una «puñetera» caja. Y es que la Black Magic es una cámara minimalista sin practicamente funciones automáticas ni presets, ni ayudas pretederminadas. Es una cámara simple en su uso, que requiere habilidad y profesionalidad para su operador.
Pero si eres habil con la cámara y saber manejar la luz, con la Cine Black Magic podrás captar impresionantes y sensibles imágenes ideales para videoclips musicales, cine independientes, documentales de autor o proyectos low cost (el cuerpo solo cuesta menos de 2.000 euros)
PROS: Un sensor de primer nivel. Excelente relación calidad-precio.
CONTRA: No graba slowmotion; y tiene un factor de recorte de 2.4x
2º RED SCARLET
Red One fue la primera cámara de CINE del mercado (que grababa «vídeo» digital en 4k, 13 stops de rango dinámico y una compresion 4:4:4 óptima para proyectos cinematográficos. Y han sido varios los modelos que le han seguido. Entre ellos la versatil RED SCARLET.
Scarlet es una cámara de CINE (en mayúsculas) de gran calidad. Con esta cámara se han grabado multitud de peliculas de primer nivel, y si tienes la suerte de tenerla entre tus manos, entenderás la diferencia de trabajar con una cámara de la familia RED.
PROS: Calidad CINE. Alta sensibilidad. Colores impecables.
CONTRA: Solo para presupuestos pudientes (es cara). Es una cámara pesada y necesita accesorios y soportes robustos.
3º CANON 5D
Sin dudas, Canon revolucionó el mercado audiovisual con su Canon 5d mark II. Le seguieron la Canon 7D, la 60D, 80D, la mark III, mark IV, etc. y la competencia (especialmente nikon) no tardó en imitar el efecto Canon.
Pero Canon se situó indiscutiblemente como lider (y sigue) en la grabación de vídeo de alta calidad con cámaras DSLR (Digital Single lens reflex) e inauguró la posibilidad a los filmmaker con poco presupuesto de captar imágenes espectaculares con un toque cinematográfico con una cámara que cabe en la palma de la mano.
PROS: Buena calidad con un precio asequible.
CONTRA: Su tamaño y limitaciones naturales, exige el empleo de accesorios complementarios. No deja de ser una cámara de fotos.
4º BLACKMAGIC URSA
De vuelta con Black Magic, esta vez nos quedamos con la URSA, una versión más potente, que permite (entre otras cosas) grabar slowmotion en 4k. Es una cámara mucho más robusta y manejable que la Cine BlackMagic. El sensor se mantiene en estándares altos y sigue en la linea de la marca.
PROS: Cámara de CINE de altas prestaciones a precios más asequibles (que las RED)
CONTRA: Demasiado pesada y grande en comparación con la CINE Blackmagic.
5º CANON C100
Canon intentó continuar con el éxito de su Canon 5D, creando esta vez una videocámara destinada (solo) a vídeo/cine (sin fotos) y prestaciones especiales para estos usos. Pero fracasa estrepitosamente en el intento y pierde la versatilidad, agilidad y accesibilidad (lowcost) de las 5D, para quedarse con una cámara pesada, cara, lenta, y con textura de vídeo camcorder que nos recuerdan más a las viejas Sony Z1 o Panasonic P2, que no a las modernas cámaras de cine digital.
PROS: Opción facil para videomakers industriales .
CONTRA: Calidad Vídeo (no cine). Baja relación calidad-precio.
En cualquier caso, mucho más importante que contar con una cámara u otra, es contar con un equipo de profesionales (director de fotográfia, operador de cámara, director, etc.) que sepan sacarle el mejor partido a cáda máquina y cada situación.
Confia en los profesionales que conocen sus herramientas de trabajo y se preocupan por estar al día en cuanto a novedades tecnológicas se refiere.