La fotografía es luz. Lo que hace posible que podamos captar y reproducir videos es luz. La luz es imprescindible en la creación audiovisual. Todo lo que entra por la óptica de la cámara e impresiona el sensor digital (antiguamente la película fotosensible) es luz.
Una vez el sensor ha captado esa luz, la envia al procesador en forma de información y este la convierte en una imagen entendible para el ojo humano.
Entendiendo esto, es facil argumentar que del control y de la manipulación de la luz a la hora de disparar un plano, dependerá el resultado final de nuestra fotografía.
A continuación, algunos consejos interesantes para plantear la iluminación en la creación de un videoclip musical.
ILUMINACIÓN EN ESTUDIO con 2 o 3 focos
La grabación en estudio es un recurso recurrente donde colocar al artista musical y que se defienda con algunos playbacks. Una forma sencilla y fácil de iluminar este tipo de situaciones con 2 focos, es colocando 1 foco detrás del sujeto (contra) y otro delante. Ambos focos situados ligeramente en un lateral. El foco de contra le dará relieve y brillos muy atractivos.
En el otro lateral puede colocarse un reflector, que le aporte un poco de relleno (suave) o un tercer foco con poca intensidad (ideal si se cuenta con dimmer y así regular la intensidad deseada)
ILUMINACIÓN EN INTERIOR natural
Si tenemos que grabar un espacio interior «real» y contamos con alguna ventana que deje pasar la luz natural exterior, una buena idea es aprovechar esa luz proveniente del sol. No hay mejor luz que la solar.
Podemos completar la luz solar con focos artificiales. Pero es importante que respetes la temperatura de color. La luz solar oscila entre 4.800ºK y 5.600ºK, la cual tiene una tonalidad neutra (blanca) y es llamada tambien «luz día». Por tanto, los focos que añadamos deben respetar dicha temperatura.
Si la luz que entra por la ventana es muy directa, quizas podamos sustituir (o completar) los focos por un reflector.
ILUMINACIÓN EN EXTERIOR de día
En un día soleado no hay mejor forma de iluminar que aprovechando la fuerza del propio sol. Puedes redirigir la luz solar usando reflectores. Tener el sol de contra y el reflector como luz de relleno, es una buena forma de obtener contrastes, brillos y relieves atractivos.
En un día nublado o si las condiciones lo requieres, se puede contar con poten
tes focos HMI. Estos focos emiten «luz día» y tienen una potencia suficiente como para compensar o imitar la luz natural del sol. El problema es que estos focos suelen ser caros, y además requieren el uso de grupos electrógenos (no se pueden enchufar a la red doméstica), lo que puede complicar y encarecer la producción.
ILUMINACIÓN NOCTURNA (interior o exterior)
La iluminación nocturna requiere (si o si) de iluminación artificial. Nuestro trabajo consistirá basicamente en complementar la luz artificial que ya exista en la escena, proveniente de lamparas, farolas urbanas, etc.
Podemos seguir un esquema similar a las anteriores configuraciones. Una luz de contra nos dará relieve y brillos interersantes, pero necesitarás reforzar con un poco de relleno lateral o frontal.
En cualquier caso, la iluminación nocturna tenderá a ser de 3.200ºK (luz cálida), salvo si se quiere simular la luz de la luna, que será de 5.500ºK (la luna rebota la luz del sol).
En cuanto a la luz lular, culturalmente asociamos la luz de la luna a tonos azulados (aunque en realidad es blanca). Esto lo podemos conseguir si trabajamos con iluminación de 5.500ºK pero ajustamos la cámara a 3.200ºK. Asi obtendremos ese filtro frio que invadirá todos los tonos.
Una buena iluminación requiere preparación y anticipación para poder organizarse y planificar la producción. Contar con buenos medios ayudará mucho, y la experiencia y talento se vuelven fundamentales, ya que una buena iluminación no suele ser algo casual, sino premeditado.